Participación en el censo de aves marinas en Gandía

El pasado sábado 11 de enero tuve la oportunidad de participar, junto al equipo del grupo local SEO-Levante, en el censo de aves marinas realizado en el puerto de Gandía. Tocó madrugar un poco, pero conforme fue pasando la mañana comprobé lo mucho que mereció la pena.

El grupo cuenta con varios miembros muy diestros en la observación de aves, de los cuales estás aprendiendo constantemente. Por lo tanto el hecho de no saber nada acerca de aves o ser sólo un iniciado (como es mi caso) no son ningún impedimento a participar. Además, yo me siento en la obligación de usar unos prismáticos de bastante mala calidad (Los únicos que tengo), con lo que (apiadándose de mi alma) me dejaron observar las aves a través de sus equipos infinitamente mejores. Es decir, tuve una experiencia de observación de aves marinas genial.

El censo tuvo una duración de 2 horas. Para realizarlo, anotábamos todas las aves que íbamos viendo en intervalos de 30 minutos. Es decir, primero las aves vistas durante los 0-30 minutos de censo, luego las vistas entre 30-60 minutos. Y así sucesivamente. La división de trabajo fue bastante sencilla. Todos los presentes mirábamos hacia el mar con nuestros equipos de observación (prismáticos o telescopios terrestres) e íbamos cantando las especies y nº de individuos de cada una que veíamos. Mientras, había un encargado en ir anotando todo lo que fuéramos diciendo. La única precaución que teníamos que tomar era no contar 2 veces al mismo individuo.

Grupo del censo en Gandía. Foto de SEO-Levante

Contar individuos era relativamente fácil (siempre y cuando volaran en una dirección más o menos fija), pero la identificación fue bastante más difícil. Sobretodo teniendo en cuenta que muchas aves están con el plumaje invernal, lo que dificulta encontrarlas en las guías de identificación. Pero gracias a los observadores más experimentados de SEO - Levante, aprendí a distinguir bastante especies de aves marinas que además están presentes en mi localidad (Lo cual siempre es un valor añadido).

Al final del censo, las especies que pudimos contabilizar fueron las siguientes:

Charrán patinegro (Thalasseus sandvicensis). foto de Andrew Easton

Gaviota cabecinegra (Ichthyaetus melanocephalus) con plumaje invernal.
 Foto bajo licencia Creative Commons 

Gaviota reidora (Chroicocephalus ridibundus) pero esta con plumaje estival.
 En invierno pierden el negro de la cabeza al igual que pasa con la gaviota cabecinegra.
Foto bajo licencia Creative Commons.

Gaviota patiamarilla (Larus michahellis)
Foto bajo licencia Creative Commons.

Gaviota de Audouin (Ichthyaetus audouinii).
Catalogada como "Casi amenazado" por la UICN

Cormorán grande (Phalacrocorax carbo)
Foto bajo licencia Creative Commons

Pardela balear (Puffinus mauretacnicus).
Catalogada como "En Peligro Crítico".
Foto con licencia Creative Commons

Alcatráz atlántico (Morus bassanus).
Foto bajo licencia Creative Commons

No obstante el censo no fue solo esto. Tuvimos un par de sorpresas que no esperábamos para nada observar.

La primera ocurrió a mitad del censo. Procedente del norte apareció una enorme "nube de flamencos". Un grupo de unos 500 individuos (ala arriba, ala abajo) pasó volando enfrente de nosotros con dirección al sur (El grupo de SEO-Levante que estaba realizando el mismo censo en Oliva también los divisaron). Fue una visión realmente extraordinaria.

Bandada de flamenco común. Foto de elaboración propia

Después de este evento, estábamos todos bastante contentos. Entenderás lo impresionante de semejante acontecimiento. Pero un rato después, uno de los miembros de SEO-Levante exclamó ¡¡Es un colimbo!!. Inmediatamente todo el mundo se puso a buscarlo entusiasmado con prismáticos, telescopios, sacando las cámaras... He de admitir que me siento un poco mal, puesto que no entendía la magnitud del hallazgo al ser tan solo un iniciado en la ornitología. De todas formas, tuve la oportunidad de observar bien aquella especie que era una "rareza" en nuestras costas (por lo que me pude enterar, son mucho más norteños ). Y parece que al colimbo le gustó el interés que suscitó, porque tuvo el detalle de posarse en el agua cerca de nosotros y dejar que los que tenían teleobjetivos le sacaran infinidad de fotos.

Foto del colimbo grande. Foto realizada por SEO-Levante

En fin, una mañana muy bien echada. Muy divertida e interesante, donde no paré de aprender. 100% recomendado. Además pude conocer a mucha gente involucrada en el trabajo con aves y puede que en un futuro tenga que hacer un nuevo post relacionado con una nueva colaboración.